
Soñar. Todos tenemos un sueño. Una idea de como debería ser nuestra vida, lo que deberíamos de tener y ser. Y todos tenemos el potencial de lograrlos. El problema es que la vida sucede y no nos detenemos a recordar nuestro sueños.
Son pocos los que se atreven a no solo soñar si no a perseguir sus sueños. Por eso los admiramos tanto. Pero no debería ser así. Deberíamos recordar nuestra infancia, cuando soñabamos en grande. Cuando teníamos ambición grande. Y no se trata de tener X cantidad de dinero. Se trata de lograr algo que parece imposible.
Así que lo que nos queda es recordar, volver a soñar y poner manos a la obra. Y el mejor día para iniciar, es hoy. No dejemos que la vida siga sucediendo sin hacer algo al respecto. Sueña. Y sueña en grande. Pero sobre todo inicia. YA.