
Los Domingos me gustan mucho. No por qué sea un día de “descanso”, si no que al haber menos movimiento puedo despertar temprano, escuchar música con audífonos, leer y escribir un poco. Me gusta reflexionar sobre lo que pasó en la semana y las cosas que haré la siguiente. Los retos, las cosas que tengo que hacer, pero siempre con muchas ganas y no odiando que mañana sea lunes. En lo personal creo que una persona que odia el lunes en realidad lo que odia es su trabajo o sus actividades. Creo firmemente en que cualquier día es bueno para crear, trabajar y demás.
Hoy pensaba y reflexionaba que cuando tenemos problemas, lo peor que podemos es seguir teniendo es metiéndonos mas en ellos. Debemos de tener la tranquilidad de podernos alejar de ellos, e incluso verlos con una perspectiva desde fuera, sin engancharnos, sin obsesionarnos. A veces tener una visión desde arriba nos puede dar mas herramientas para resolverlo. Creo que todo se resumen en no tener que reaccionar si no ser muy pacientes, cuidadosos y responder ante ellos recordando que no es lo que nos pasa, si no nuestra perspectiva sobre los problemas lo que nos llevará a resolverlos o no.